Las comisiones por cancelación anticipada estarán limitadas y tienen una penalización de hasta el 4%.

Se prohíben las ventas vinculadas, por lo tanto, el cliente no tendrá que aceptar productos financieros como condición para firmar la hipoteca.

Se facilitan las reconversiones de hipotecas de divisas de otros países a hipotecas en euros.

Se eliminan los incentivos a los empleados de banca por lograr hipotecas.

Se dan otras facilidades como para el cambio de préstamos hipotecarios de interés variable a fijo.